No eres el color de pelo ni el corte.
No eres el piercing que adorna tu cara ni los tatuajes que hacen lo mismo con tu cuerpo.
No eres la ropa que llevas.
No eres la talla de tu sujetador ni la de tu pantalón.
No eres el color de tu piel ni el de tus ojos.
No te defines por la cantidad de hombres/mujeres que puedas tener prestándote atención.
No eres tu foto de perfil de las redes sociales ni los me gusta/favs que puedas conseguir.
Eres la sonrisa que adorna tu cara cada día.
Eres tus palabras.
Eres las risas que sacas a tus amigos.
Eres una persona, no una etiqueta.
Somos lo que queremos ser, no hace falta tener que ser lo quieren los demás.
ResponderEliminarMe ha gustado :)
Besos con cianuro y pásate.
Ahí le has dado. Debemos vivir para ser felices no para satisfacer a los demás. Besos de una soñadora y claro que me paso:).
EliminarPrecioso y totalmente cierto! Me ha gustado mucho! tienes muchas entradas que me han gustado :)
ResponderEliminarTe sigo!!
Pásate por mi blog si quieres y me sigues ;) Sería un honor!!
Un beso muy grande y gracias!
http://viviendoennuestrocuento.blogspot.com.es/
Gracias por tu opinión y el comentario y, ¡claro que me pasaré por tu blog! Un besazo:3.
EliminarMuy cierto, es muy importante que no te dominen los demás, debes ser tú mism@, sin dejar que acaben contigo.
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